EL PERIODISMO DE AYER, HOY Y MAÑANA

26.08.2010
¿Recuerdan que a principios de año todos los periodistas decían que el gobierno siempre hacía algo para dañar su propia imagen, que tenían una terrible inclinación a la autodestrucción?
Esto surgía, de la supuesta forma en que se le había pedido a Redrado que se alejara de su cargo en el BCRA. Nadie recalcó la forma en la que este mismo se quiso aferrar a dicho puesto, dando vergüenza ajena ya que se había olvidado, que los hombres pasan y las instituciones quedan. También recuerdo que por aquellos meses, todos, pero absolutamente todos los economistas de turno salían por los medios a despotricar contra la decisión del gobierno, diciendo que estaban creando el Fondo del Bicentenario, con la única intención de pagar rápido para poder salir a los mercados lo antes posible, para poder refinanciarse ya que los compromisos con la deuda externa, a lo largo de este año serían impagables.
Estamos casi en septiembre y las reservas gastadas en dicho fondo, se recuperaron y luego crecieron, los pagos se han realizado en tiempo y forma, el riesgo país continúa descendiendo, y nada se dice de salir a los mercados a conseguir dinero fresco para financiarse, sino todo lo contrario, se está viendo como se puede negociar el pago al Club de París, para sacarse de encima, también esa deuda.
Hoy escucho a estos mismos periodista esgrimir nuevamente el verso de la autodestrucción de la imagen, pero esta vez con el tema Papel Prensa S.A., en los días previos estos periodistas y sus jefes salieron al “mercado de la información”, a decir y sobrevalorar y atajarse, sobre lo que el día 24 de agosto podría mostrar el informe que presentaría el estado como socio minoritario de dicha firma. A tal punto estaban expectantes y nerviosos que los grupos Clarín y La Nación accionistas mayoritarios de esta empresa, lanzaron por TV videos de cámaras ocultas y “aclaro ocultas, porque se las nombraron como de seguridad, y la verdad es que sería la primera vez en mi vida que veo una cámara de seguridad que hace tomas desde una altura que no supera la cintura de una persona de estatura normal”, donde se lo veía a Guillermo Moreno arengar en un intervalo a los representantes del estado, para frenar una votación, donde simbólicamente repartía guantes o cascos, en señal de lucha. Además, hicieron publicaciones donde se pisaban solitos, como fue la frase del informe anticipado que titulaba de la siguiente manera: “El Gobierno Avanza Sobre Papel Prensa, Para Controlar La Palabra Impresa” Poder que ellos ejercen desde hace 33 años…
A confesión de parte, relevo de pruebas. Dijo en su discurso la presidenta…
Más claro “échale tinta”… agregaría yo.
En los días previos, la oleada de presunciones y prejuzgamientos, lanzadas a los medios, por parte de los medios, sobre lo que sucedería y las medidas que tomaría el supuesto Estado autoritario y dictatorial, fue increíble
La pregunta sería ¿Por qué alguien que se presume inocente sale a defenderse anticipadamente y a prejuzgar algo que aún no sucedió?
Tras el envío del informe a la justicia, “como corresponde” para que esta resuelva, todos aquellos comentarios sobre una dictadura gubernamental, se acallaron y salieron a relucir las nuevas mentiras.
Ahora el supuesto periodismo independiente, menosprecia toda la información recaudada que yacía sobre un escritorio, dice que el informe se cae por falta de información, que la misma no es nada nuevo, que el gobierno se echó atrás con la supuesta intervención, que el discurso fue de un tinte Chavista, donde solo faltó la palabra exprópiese, que fue un papelón de la presidenta, hasta escuche comentar la cantidad de furcios cometidos en su discurso, se le criticó un error donde en vez de 5 dijo 15 años, que leyó demasiados papeles, que tanto espamento para nada, etc.
Talvez, estos periodistas querían acción, drama, sangre, muerte, como en las películas, a ellos les digo, tarde o temprano la justicia independiente les hablará en su fallo, sobre todos estos temas, no debía ser la interlocutora la que lo dijera.
No tardará en llegar la nueva y repetida oleada y envestida mediática de los clásicos gurús de la economía Argentina, que defienden intereses corporativos y extranjeros, pronosticando una nueva etapa de incertidumbre donde la economía reventará, la fuga de capitales, el dólar a no se cuanto, etc.
A mi criterio estos periodistas lo que deberían hacer es volver a la escuela de periodismo y recursar todas las materias…
O talvez, ese es el error, estar hoy en una escuela, “en una escuela privada”, donde se hace y se dice lo que el dueño de dicha institución, quiere…
Siempre escuché decir que cada pueblo tiene el gobierno que se merece, hoy también puedo decir, que cada pueblo tiene el periodismo que se merece.
Rubén Afonso Boaventura